0011 SEGUNDAS OPORTUNIDADES. 09/01/21

Creo en las segundas oportunidades. Esas que tanto cuesta dar. Esas que tanto duele no recibir.

Los seres humanos somos las máquinas más perfectamente imperfectas jamás creadas. Crecemos del error, aprendemos del error…. Vivimos del error.

¿Te has parado a pensar por qué se crearon las gomas de borrar? ¿O el tipp-ex? ¿Por qué los teclados tienen tecla de delete o de suprimir? ¿Por qué el mando tiene botón de atrás?

Todos nos equivocamos. Yo lo hago tan a menudo que he aprendido a levantarme de la cama sabiendo que lo haré, y aunque suene tópico, si meto la pata mil veces solo tengo que pedir perdón mil una.

Y sé que perdonar errores es ser injusto con los aciertos, pero no hay mayor error que dejar que el orgullo controle tu vida, porque al final no tendrás vida, sino orgullo.

Creo en las segundas oportunidades. Sí, es evidente que si un papel se arruga jamás vuelve a ser lo que era, pero ¿quién dijo que un papel arrugado tiene que ser feo? ¿Quien dijo que no puede reciclarse ese mismo papel para volver a escribir sobre él?. Eso quiero hacer hoy yo, reciclar el papel que decía “es demasiado para ti” y volver a escribir sobre él un “¿Y por qué no?”

He visto madera astillada convertirse en robustos tablones. He visto botellas vacías convertirse en jarrones de crisantemos.

Porque si segundas partes nunca fueron buenas yo pienso que puedo cambiar eso.

Déjame besarte hoy en honor a los recuerdos de un pasado que no quiero que vuelva. Un pasado que tampoco quiero olvidar, para que así se convierta en la cicatriz sobre mi piel que me recuerda lo que me hizo sangrar.

Si pasó, tuvo que pasar. Pero, ¿quién dijo que tuvo que pasar al olvido? Tomemos la vida como una sucesión de momentos que tienen hora y lugar. ¿Y si simplemente no tenía que pasar entonces? ¿Y sí ahora sí?

Creo en las segundas oportunidades. En que los trenes pasan más de una vez, en que el mundo está lleno de estaciones con múltiples trenes que te llevan a la felicidad. ¿Y si lo pierdes? Tranquilo, solo siéntate en el banco y aparecerá otro, quién sabe si mejor…

Creo que la vida me debía muchas conversaciones, me debía transformar mi punto y final en un punto y seguido. Pienso que la vida ha tardado ha decidido darme una segunda oportunidad.

Y yo creo en las segundas oportunidades.

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